Recuento de una semana sin Luna

Este es mi primer día sin ti
y te siento tan lejana como la luna,
se que pronto volveré a verte,
que regresaras,
pero aún así la angustia de no sentirte me abruma.

Mis ojos se derriten
y mis manos gritan por sentirte de nuevo,
te instalaste tan profundo en mi memoria
que siento tu ausencia tan intensa
como la idea de perderte.

Ayer te sentí, te bebí, te viví, te amé
hoy te amo pero no te siento
hoy te vivo pero no te bebo

Solo espero
que con la llegada del nuevo día
tu corazón me grite que estas a mi lado,
solo espero que a tu regreso
te quedes para siempre aquí a mi lado.

(Solo hace unas horas que no estas aquí)

Desperté y seguía solo,
nuevamente no supe de ti
más que por unas fotos
y miles de recuerdos vivos
que me mantienen de pie
y me permiten seguir mi existencia.

Hoy el día fue gris, triste,
aunque el sol brillaba en lo alto
seguía sintiendo el dolor
y la oscuridad de tu no estar.

Las horas, mis crueles compañeras
seguían su lento transcurrir gritándome
que no estabas a mi lado,
el reloj, ese macabro juez y verdugo
me quemaba recordándome
que aún no podría estar a tu lado.

Esta noche te dejo una promesa,
te visitaré en donde estés
y te haré el amor entre sabanas blancas,
gritarás mi nombre entre gemidos
y volverás a sentirme
mientras duermes.

Esta noche te amaré como nunca te han amado
te dejare un beso, una caricia;
al separarme de tu sueño,
mañana seguiré esperándote en mi nube
esperando tu llamada,
soñando un te quiero y llorando tu no estar.

(Y sigo insistiendo en pertenecerte hasta que el sol muera)

Hoy hace ocho días
que nos amamos – como locos –
hoy hace ocho días
que me dejaste un te quiero
hoy hace ocho días
que te besé por última vez.

Todo el día
he recordado la sensación de tu cuerpo sobre el mío
todo el día
he sentido tus labios sobre mis labios
todo el día
te he pensado y recordado nuestra última vez.

¡Esta ausencia tuya
me aniquila y duele como nunca!
¡Esta ausencia tuya
me congela tras la ventana esperándote!
¡Esta ausencia tuya
solo consigue extrañarte más!

Cada segundo falta menos
para escuchar tu voz diciendo mi nombre,
cada segundo falta menos
para mirar tus ojos mirando los míos,
cada segundo falta menos
para sentir tus labios rozando mi piel.

Esta noche te rendiré un homenaje,
esta noche brindaré en tu nombre,
esta noche seguirás aquí.

(El tiempo, gran culpable de mi desdicha)